ELCIDES COMPARTE (Testimonio)

Hermanos: como muchos de ustedes saben, el Señor me llamó este verano para hacer ( como convivente ) la CcPe en San Nicolás y me sorprendió invitándome ( como servidor ) a la CcPe en La Paz. Y éste llamado a servir
Paz fue muy especial por varios motivos:

Primero: las dudas y ansiedades de cambiar de roles ( de convivente a servidor ), sin tener experiencia, sin haber visto nunca una carpeta, buscando excusas para decir que nó, se calmaron cuando decidí abandonarme totalmente a Él y recién ahí pude experimentar tranquilidad y confianza.

Segundo: ¿de que manera vivir la convivencia?, me preguntaba si el gozo que todavía tenía de haber estado en San Nicolás no se "entrometería" con mi rol de servidor; si los nervios no me jugarían una mala pasada al momento
de estar al frente de los conviventes; si el manejo en el grupo sería el correcto. Y fui testigo - una vez mas - de Su obra, porque complementó tan armoniosamente todo que fueron seis días de vivir como convivente/servidor/acompañante.

Tercero: varios cambios en el equipo ( uno o dos días antes de comenzar y hasta en el primer día ), por un lado me generaban dudas ¿con que servidores me encontraré, me tendrán paciencia? y por el otro una entrega TOTAL al Señor conciente que era SU plan que todo ocurriera de esa manera.

Y desde las visperas supimos que Dios se derramaría a mares con su Gracia en La Paz. Porque fuimos bendecidos al tener en la primer misa y contemplación al P Alberto Ibañez, el instrumento que utilizara el Espíritu Santo para fundar esta bendita Comunidad de Convivencias y porque luego tuvimos DOS sacerdotes ( el P. Pepe Calandra y el P. Ezequiel Aguero ) y porque despuès en cada una de las contemplaciones se sentiría la presencia de la Ruaj sanando, fortaleciendo, iluminando, derramando dones y carismas. Gracias y Bendiciones que fueron inundando cada uno de los corazones de quienes estábamos ahí hasta el última contemplación, antes de la misa final que fue
como siempre una fiesta en el Señor.

Este email lo envío a todos los contactos. Para los que sabían: muchas gracias por sus oraciones. Para los servidores de la CCcD: muchas gracias por sus palabras de aliento y la confianza que me dieron. Para los colaboradores y conviventes: cuando desde nuestros corazones salen solamente palabras de Gracias - Te amo - Soy tuyo - Aquí estoy - Estoy dispuesto etc. etc para nuestro Señor, tengamos en cuenta que Él toma nuestra palabra y en cualquier momento nos la hace recordar, para ver si estamos dispuestos realmente a responderle que sí cuando nos dice: TÚ SÍGUEME.

Un abrazo en Cristo.